Una buena acción como sonreír, platicar o simplemente “estar” son elementos esenciales para cumplir con una buena responsabilidad social, y aplicarlo en los adolescentes es complicado, pero no imposible.
¿Qué es la responsabilidad social?
La responsabilidad social es un cúmulo de buenas acciones enfocadas a generar un cambio, pero antes hay que tener en mente que una buena acción no siempre implica un gesto grande, pues algo pequeño y gratificante para alguien más, se puede convertir en la diferencia que éste necesita, es decir, un pequeño gesto puede sumarse a miles y desembocar en un gran cambio.
La tarea de los educadores está en fomentar que los adolescentes hagan muchas acciones pequeñas para comenzar a gestar la diferencia.
Y sí, es complicado enseñar a los adolescentes a ayudar a los demás –aunque sea con pequeñas acciones–, ya que es en esta edad cuando más son rebeldes y quieren todo para ellos.
Sin embargo, tampoco es necesario que los adolescentes formen parte de una ONG o club de benefactores para empezar a ayudar a los demás, a veces algunas acciones simples puedes hacer la diferencia:
- Sonreír a las personas y tratarlas amablemente.
- Llegar a un lugar y saludar a todos.
- Darle el asiento a alguien más en el transporte.
- Colocar la basura en su lugar.
- No gastar más agua de la que necesitas.
- Dar una pequeña limosna a quien te lo pide en la calle.
- Ayudar a un compañero de escuela.
Son las 7 acciones pequeñas que pueden comenzar a generar una buena responsabilidad social en otras personas. Para lograrlo, todos los involucrados –docentes y familia– pueden ayudar a gestarlas desde la adolescencia.
Con eso en mente, tenemos la oportunidad de mostrarle a los jóvenes que son relevantes sus puntos de vista y opiniones, pero –lo son aún más– comprender aquello que no entendemos o estamos e desacuerdo.
Además, está comprobado que ayudar a los demás incide directamente en el desarrollo de los alumnos, ya que:
- Activa regiones del cerebro asociados con el placer y la confianza.
- Genera gratitud, que a su vez refuerza la conexión emocional con otras personas de su entorno.
Falta mucho por hacer y comprender, en el Colegio Cedros sabemos que, tanto en el colegio como en el hogar, recae la misión de enseñarle a los jóvenes las diferentes realidades que existen en el mundo; de esa manera, ellos podrán valorar lo que tienen, para que un dia cercano ellos –de igual manera– puedan enseñar a otros a ser agradecidos.
Por eso, comprometidos con el fomento de la responsabilidad social, en el Colegio Cedros contamos con el programa de ayuda y acción social a cargo de nuestro Coordinador General de Compromiso Social, Maikel Ansted Hoffmann, quien en el siguiente video te explicará todos los detalles:
Es un área que lleva –relativamente– poco tiempo, pero que ha dado y seguirá brindando grandes beneficios para los alumnos y para la sociedad en general.
Te invitamos a conocer más acerca de nuestra oferta educativa, tanto en la primaria como en nuestra secundaria privada; sus ventajas y todo aquello que nos convierte en una gran comunidad.
