El desarrollo de cualquier niño necesita de un estilo de vida saludable: comer bien, dormir lo suficiente y hacer ejercicio. Son tres elementos que en el futuro pueden construir adultos sanos; por eso la escuela –donde pasan gran parte de su tiempo– es el lugar idóneo para forjar buenos hábitos.
Cuando tu hijo juega, sus sistema límbico (también conocido como "cerebro emocional") se dispara; comienza a sentir placer y alegría. Repite una y otra vez las actividades que más le gustan hasta que las automatiza, es decir, las hace de manera natural, como un hábito bien formado.
Ahora, ¿qué pasaría si esos juegos se dirigen hacia el aprendizaje continúo del niño? Se mejoraría la percepción que tienen de su entorno y aumentarían sus habilidades en todas las áreas de su desarrollo y, además, aprenderían a manejar su personalidad de la mejor manera.
El aprendizaje de los niños parte de sí mismos y cuando aprenden a dominar su cuerpo son capaces de conocer y controlar mejor tanto las emociones como los pensamientos.
Por eso, algunos juegos que estimulan el desarrollo físico de los niños pueden ser los siguientes:
Carrera con sacos
Una sana carrera con sacos mejora el equilibrio y aprenden normas de comportamiento; es decir, aparte de conocer y adaptarse a ciertas reglas, también pueden saber el significado real de la victoria y la derrota.
Twister
Por supuesto que el twister ayuda más en el nivel físico: concretamente en la flexibilidad y conciencia corporal. También ayuda a que el niño socialice en un entorno bastante accesible.
Carrera de obstáculos
Una carrera de obstáculos aumenta el sentido de competencia –que siempre es muy importante– y, sobre todas las cosas, sirve para que el niño desarrolle su capacidad física de sobremanera.
Avioncito o rayuela
El avioncito es un juego de la infancia que los adultos siempre recuerdan con cariño y es por algo: proporciona risas y mucha alegría. Por supuesto que también puede contribuir al equilibrio y coordinación de cualquier niño, dos elementos indispensables para construir una vida saludable.
<< Conoce cómo fomentamos el aprendizaje a través del juego >>
Queda demostrado que para jugar no se necesitan juguetes, ya que el juego es parte del ambiente de los niños y una de sus virtudes es ayudar a mejorar la percepción que tienen de su entorno.
En nuestro kínder de la colonia Del Valle propiciamos y llevamos a cabo actividades de juego y movimiento que favorecen el desarrollo de nuestros alumnos, por eso cada alumno mejora en los siguientes aspectos:
- Tiene mejores períodos de concentración.
- Mejora su autoestima.
- Reduce los síntomas de ansiedad.
- Mejora sus habilidades socio-emocionales.
- Mejora sus habilidades de lenguaje, motrices, de postura y equilibrio.
- Cuenta con una mejor condición física, fuerza muscular y funciones cardiorrespiratorias.
Si quieres saber más de nuestro modelo educativo, te invitamos a conocer a Elizabeth Bolívar, directora del kínder que te contará las actividades y la ideología del colegio.
El kínder en colonia del Valle de Cedros podría ser la mejor opción formativa y educativa para tu pequeño. Agenda una visita y conoce nuestro modelo educativo.
